domingo, 29 de septiembre de 2013

EL SINDICATO DE OBREROS/AS DE TROLL ABANDONA LA UGT.

El pasado 31 de agostos, los/as compañeros/as de la sección sindical sobrevivientes a los dos expedientes de extinción, decidimos en asamblea disolver la sección sindical y solicitar la baja de afiliación en el sindicato del metal de la UGT (MCA-UGT). La decisión se tomó por unanimidad y nadie tuvo la más mínima duda.
Hemos podido soportar a lo largo de estos años de militancia -y recalcamos bien lo de militancia- diferencias con el funcionamiento diario del sindicato y con la línea general de la organización; por nuestra parte siempre hemos participado en los organismos de consulta y nunca nos hemos privado de aportar nuestras ideas, por contrarias que fueran a las expuetas por los dirigentes. Siempre habíamos creído que unos trabajadores/as como nosotros/as teníamos cabida en un sindicato como la UGT, donde a pesar de la institucionalización y la burocratización, quedaba un sitio para la pluralidad y para un modo de entender el sindicalismo diferente. Seguramente hubiera sido así, si la crisis no se hubiera cruzado por medio con dos expedientes de regulación y un rosario de despidos.
El primer expediente de regulación que se saldó con 32 despidos en marzo del año pasado, minó por completo la confianza en A. C., secretario de MCA del Vallès Oriental-Maresme. No entraremos en detalles. En el expediente del pasado junio -que se llevó por delante a 64 compañeros/as decidimos que no necesitábamos como asesor a A. C., que teníamos suficiente capacidad para llevarlo nosotros/as, aunque se informó en todo momento al sindicato de la marcha del proceso. Se informó que se iba a un conflicto abierto, dado que la empresa no sólo no iba a negociar sino que no tenía intención de pagar indemnizaciones, lo que nos abocaba a la huelga.
La huelga se produjo -la primera en la historia de la empresa y la primera nuestra como conflicto propio- pero a pesar de solicitar ayuda a nuestro sindicato y al conjunto de la organización comarcal, no vino ni una sola persona.
Para nosotros/as esta manera de obrar ha sido la causa principal de nuestro decisión de disolver la sección. Fue una verdadera vergüenza que recibieramos la solidaridad de gente que apenas conocíamos y que por parte de UGT se nos negara todo; ¿si hemos ido como parte de UGT a los deshaucios en apoyo de la PAH, no nos merecíamos nosotros/as con más motivo un mínimo de apoyo y solidaridad?. Para nosotros/as fue un mazazo y la constación clara de que los problemas de los trabajadores/as son un tema secundario en las agendas de los dos sindicatos mayoritarios. Dejando aparte nuestras diferencias ideológicas con el secretario del metal de la comarca, ¿no se merecían nuestros/as compañeros/as afiliados/as, el aliento y apoyo de la organización a la que han estado pagando durante años?
Decíamos que abandonar la UGT ha sido una decisión clara. No necesitó meditación, el día 9 de junio, la primera jornada de huelga a las 9 horas de la mañana ya lo teníamos claro. Pero sí ha sido una decisión dolorosa. Durante ocho años nos hemos volcado en el funcionamiento del sindicato. Hemos estado en todoslos sitios donde nos han llamado: manifestaciones, concentraciones, asambleas, deshaucios y lo hemos hecho con orgullo, creyendo en el sentido primigenio de la solidaridad y la lucha colectiva. Hemos hecho lo que ya casi nadie hace -a no ser que se cobre por ello-, militar. Por ello, no ha sido una decisión fácil, al contario nos llena de melancolía el hecho de dejar ocho años de nuestra mejor época sindical y nos apena el hecho de dejar a un buen numero de compañeros/as con una vocación sindical sincera sin apego a las sillas o a congraciarse a toda costa con los empresarios.
Nosotros/as continuaremos en la trichera de los trabajadores/as, cada vez más desaborlada por esta crisis que lo está cambiando todo. Nos vamos en bloque a otro sindicato más pequeño, más ideologizado, más voluntarioso, más reivindicativo...más como somos nosotros/as, y aquí seguiremos defiendo lo de siempre: un poco de decendia en las relaciones humanas.
Hasta aquí hemos llegado, no podemos por menos que despedirnos de blogueros ugetistas de primera hora, como Ildefonso de la Fira de Barcelona, de Paco de Syntesia o de Maxi Rica de Hostelería de Girona; también de gente de la comarca: los compañeros de la Camp (Requitt-Benkiser) o la gente del Hospital de Granollers, con la buena gente siempre se acaba coincideindo en la calle, así que no os decimos adiós sino hasta pronto. Tampoco daremos de baja -por el momento- este blog, nos ha sido una herramienta de gran utilidad y lo hemos querido mucho y cada artículo de opinión  lo podemos firmar hoy como en el momento que lo publicamos. Siempre hemos sido fieles a nuestra manera de entender el sindicalismo, por ello sin revanchismo, sin ganas de desacreditar a nadie, deseamos lo mejor para lo organización.
Con este último post damos cumplimiento al último acuerdo tomado en la asamblea de disolución de la sección sindical: publicitar la noticia. Se informó al secretario de organización de nuestra federación y ahora lo hacemos público, siempre dando la cara y con seriedad como nos gusta hacer las cosas. Es momento de despedidas y de agradecimientos. Para el público que lo desee, en breve pondremos un enlace para un nuevo blog: el lector verá que cambian las siglas pero la continuidad será la misma.
Hasta siempre!.

miércoles, 24 de julio de 2013

LUXIONA INTENTA CHANTEJEAR A LOS TRABAJADORES. LA LUCHA CONTINÚA



El parlamentario Joan Mena
en la acampada de Canovelles.
El pasado viernes 19 de julio, la dirección de Luxiona convocó a una reunión al Comité de Empresa sobre el "seguimiento del ERE". La dirección de la empresa no comunicó la única noticia que podía dar, es decir, el reingreso de los/as despedidos o el pago de la indemnizaciones, sino que viró en dirección  a Los Soprano en lugar de que quedarse en el lugar que sólo pueden estar: en el del respeto y el cumplimiento de las leyes del Estado de derecho. Todos/as sabemos que los empresarios son demócratas oportunistas,viven y medran lo mismo en una democracia que una dictadura y si cumplen con alguna ley, es sin duda, la del máximo enriquecimiento. Por ello, la dirección de Luxiona no sólo no nos comunicó que pagarían las indemnizaciones a los 64 trabajadores/as -que ya llevan más de un mes despedidos-, sino que dejó caer un discurso lleno de circunloquios -mil veces repetido en las mejores películas del género- sobre lo que tenían que hacer los/as trabajadores/as despedidos si querían cobrar.
La propuesta de la empresa -quitadas las buenas palabras- era clara: si los trabajadores querían cobrar la indemnización (en tres veces hasta diciembre) el Comité de Empresa tenía que retirar la impugnación del ERE y los trabajadores/as tenían que cesar inmediatamente en sus acciones de protesta.
La propuesta de la empresa lo único que ha conseguido es levantar la indignación de los/as compañeros/as despedidos/as. También preocupación, pues a nadie escapa que tan sólo dos de los cinco delegados de CCOO han accedido a firmar la impugnación del Comité. Como todos/as conocemos la sintonia de estos dos delegados/as con la empresa, el miedo está más que justificado. Pero la decisión de protesta y reivindiciación  de los/as compañeros/as es tan firme y la propuesta de la empresa ha creado tanta indignación, que los dos delegados de  CCOO tendrían que pensárselo muy bien si quieren volver a vender a los/as trabajadores; sabemos que ni siquiera la gente que está con ellos apoya retirar la demanda.
Todo esto pasaba el viernes, al tiempo que nos visitaba en la acampada de Canovelles, Joan Mena, portavoz adjunto del grupo de EUiA-Icv en el Parlament de Catalunya. Joan Mena vino junto a la compañera Marisol, de la Ejecutiva federal de IU, para interesarse por nuestra lucha, y darnos todo el apoyo y repercusión posibles. El encuentro fue emotivo y significó una fuerte inyección de moral para los/as acampados/as, pues de algún modo comprobaron que no es una lucha en soledad, sino una injusticia intolerable para el conjunto de la sociedad. Joan Mena tomó nota de la situación y se comprometió a dos propuestas de gran alcance para nosotros/as: trasladar un conjunto de preguntas parlamentarias al Conseller d´Empresa i Ocupació sobre Luxiona y una invitación al Parlament para exponer delante de todos los grupos el drama que estamos viviendo.
Así que mañana el Sindicato de Obreros/as de Troll, junto con una delegación de trabajadores/as despedidos/as estaremos en el Parlament. Diremos a Sus Señorias que no cedemos a los chantajes, que seguiremos con nuestras protestas pacíficas hasta que consigamos recuperar los puestos de trabajo. No nos tenemos que avergonzar de nuestros actos, que se avergüencen los propietarios y ejecutivos de Luxiona que han despedido a 64 trabajadores/as y los han dejado en la calle sin un duro.
Desde el SOT queremos correspoder con nuestra mayor gratitud a las gentes de EUiA, un moviento político, que está demostrando que está del lado de la clase trabajdora.

miércoles, 17 de julio de 2013

LUXIONA: LOS/AS TRABAJADORES/AS DESPEDIDOS SIGUEN SIN COBRAR LA INDEMNIZACIÓN

Mañana, hará justo un mes que Luxiona empezó a despedir a los 64 trabajadores/as incluidos/as en el último expediente de extinción presentado por la empresa, y lo más increible es que todavía no ha pagado a nadie la indemnización legal establecida para los despidos colectivos.
Un mes llevan también una veintena larga de trabajadores/as despedidos acampados/as a las puertas principales de Luxiona en el Passeig de La Rivera de Canovelles. Es una acampada apoyada por el Sindicato de Obreros/as de Troll y llevada a cabo por una parte del colectivo de trabajadores/as despedidos, ya que el resto, ha preferido seguir las consignas de CCOO de no hacer nada, no molestar a la empresa y fiarse de su palabra de que algún día cobrarán.
La acampada se monta cada mañana a partir de la 7 horas y se mantiene hasta las 15 de la tarde, en diferentes turnos que confeccionan pancartas y montan guardia frente a las oficinas para exigir el pago de las indemnizaciones. La acampada se mantiene, dado que los/as compañeros/as despedidos se sienten estafados por  los ejecutivos y la propiedad de la empresa, que no dejan de responder con evasivas y negándose a fijar una fecha concreta de pago.
Desde el Sindicato de Obreros/as de Troll trabajamos con la hipótesis de que la empresa tenía prevista esta situación muchos meses atrás de la imposición del ERE de extinción. Descontamos el hecho de que la gerencia entrará en concurso voluntario de acreedores a partir del 7 de septiembre -fecha en que vence el preconcurso-, para evitar el pago de las indemnizaciones y de paso, el salario del escaso centenar de trabajadores/as que aún quedamos en la fábrica de Canovelles. Ovbiamente, es una predección, pero el hecho de que están dando largas nuestros/as compañeros/as despedidos/as sin rubor alguno, de que no nos hayan pagado la extra de verano o la tranquilidad que siguen exhibiendo los directivos nos lleva a pensar, que por desgracia, no nos vamos a equivocar.
Por de pronto, nuestros/as compañeros/as de la acampada están mostrando un coraje salido de no sabemos dónde. La acampada se mantiene semana a semana -estamos en la cuarta- y están significando un oasis de dignidad y de resistencia en un desierto de resignación y de miedo. Parte de los despedidos, aconsejados por CCOO, lo apuestan todo a la vía judicial y la mayoría de compañeros que no han sido despedidos parecen haber entrado en un proceso de amnesia, donde se vive con una aparente despreocupación, el drama de los despedidos sin indemnización, el impago de parte de los salarios y el futuro negrísimo que nos espera. Por de pronto, estamos con la gente de la acampada, con la gente que lucha y se niega a creer que algo tan increible como lo que nos está pasando, se pueda acabar acpetando como una situación normal e inevitable.
Desde estas páginas, queremos seguir mostrando nuestro agradecimiento a la CGT, con cuyo apoyo logístico podemos mantaner la acampada y las acciones de protesta y a EUiA de Canovelles, que cada mañana nos apoya con su presencia y solidaridad.

miércoles, 19 de junio de 2013

LUXIONA DESPIDE A 64 COMPAÑEROS/AS

Al final Luxiona ha hecho lo que le es propio: deshacerse de la gente sin miramientos. Sin tener todavía la liquidez para hacer frente a los despidos, esta mañana mientras estabamos concentrados delante de la empresa en el paro parcial diario, empezó a comunicar de maneral verbal a algunos compañeros de oficinas -que no secundaban los paros- que serían despedidos/as. En la misma mañana entregaban a la mayoría de CCOO la resolución del expediente con una lista de 64 compañeros/as.
Una decisión dramática que confirma lo que llevamos tiempo denunciando: la deslocalización de la producción. El ajuste ha sido muy limitado en las oficinas y por contra concentrado en las secciones de producción; prácticamente el 80% de los que van a despedir son de las secciones de fábrica, desmantelándose casi por completo las secciones de montaje, expediciones y pintura. La limpieza de trabajadores del grupo 6 es espectacular, dejando en algunas secciones sólo jefes de equipo y en otras más encargados y jefes de equipo que trabajadores. Se ha consumado el proceso de desaparición de la producción en Canovelles en un momento en el que apenas quedarán una trientena de trabajadores/as directos.
Lo más triste de todo es que mañana empezarán a desfilar nuestros/as compañeros/as y no sabemos si cobrarán su indemnización, la última burla de una manera de hacer empresarial que no ha mostrado el menor remordimiento o compasión. Mañana se empezará a ir lo mejorcito, se quedarán los de siempre, los que dicen a todo sí, los que se esconden detrás del trabajo bien hecho de la gente competente... con estos mimbres nos vamos derecho al concurso.
Mañana será un día muy triste y muy duro. Estaremos con nuestros/as compañeros/as apoyándolos en este mal trago y animándoles a que sigan la lucha si es que la empresa no tiene la decencia de pagarles las indemnizaciones.

domingo, 16 de junio de 2013

LUXIONA: ÉXITO DE LA HUELGA. LAS MOVILIZACIONES CONTINUAN

La presencia de compañeros/as de la CNT, CGT y
la PAH fue de una inestimable ayuda.
Ya podemos hacer un primer balance de las movilizaciones que hemos llevado a cabo esta semana: han sido un éxito. No rotundo, no completo, pero un éxito. Las dos jornadas de paros completos se han saldado con una participación del 90%, una cifra extraordinaria para una empresa que no había realizado nunca una huelga en sus 83 años de historia. El paro en la fábrica fue prácticamente completo y  algo menos en oficinas, donde la mayoría de CCOO, ya nos hacía suponer que la situación iba a ser más complicada.
Los/as trabajadores/as hemos demostrado que a pesar de tener una mayoría del Comité afín a la empresa, se puede mantener la lucha cuando nos estamos jugando nuestro propio futuro. Debemos reconocer en este artículo, la ayuda impagable que nos han prestado los/as compañeros/as de la CGT, la CNT y la PAH, que estuvieron con nosotros/as en los piquetes desde las cinco de la mañana en las dos jornadas de huelga. Una ayuda que no hemos recibido de los tres sindicatos con representación en el Comité: CCOO, UGT y USOC. El papel de estos sindicatos ha sido lamentable, en especial, el nuestro, que a pesar de haberles solicitado ayuda, no nos mandó a nadie; ni siquiera se han interesado por la marcha de la movilización. Con esta manera de actuar, empezamos a entender cómo los sindicatos confederales mayoritarios se encuentran entre las instituciones peor valoradas por la sociedad, sólo por encima de la Iglesa y de los partidos políticos; cada vez está más claro que los sindicatos mayoritarios son parte del problema y no de la solución.
Hacemos una mención especial a la CNT de Granollers, que nos dedicó un precioso artículo de solidaridad en su blog, sólo les podemos corresponder diciendo que la solidaridad, con solidaridad se paga.

Lo importante es que la lucha segurirá su curso. La empresa no ha variado un ápice su postura, sigue sin asegurar el pago de las indemnizaciones mínimas legales y además vincula el pago de estas indemnizaciones al pago de la extra de verano y la nómina del mes de junio al resto de la plantilla, con lo cual, la situació a la que nos enfrentamos es muy delicada. Como máximo, la empresa tiene de plazo hasta el próximo 21 de junio para registrar el expediente, lo que nos deja una semana de lucha antes de que empiecen los despidos. Para la semana entrante, desde el Comité se ha planificado paros parciales diarios: lunes, martes y viernes de 9 horas a 10:30 horas; miércoles y jueves paros a partir de las 11 horas y celebración de manifestaciones al centro de Granollers.
Redoblamos los llamamientos a la solidaridad, en especial para las manifestaciones del miércoles y jueves, esperemos que sean multitudinarias. No esperamos ya nada de la UGT como sindicato, por ello todos/as los/a compañeros/as que vengan a echarnos un cable en esta encrucijada tan difícil, serán recibidos con todo el cariño del mundo.

domingo, 9 de junio de 2013

LUXIONA IRÁ A LA HUELGA

Al final no pudo ser. La última reunión celebrada ante la Inspección de Trabajo, no sirvió para que la empresa se aviniera a razones, y la huelga -si un milagro no lo remedia- empezará el martes 11 de junio.
No ha servido de nada la flexibilidad y los intentos denodados por parte del Comité de evitar el conflicto: la empresa en ningún momento quiso asegurar el pago de las indeminizaciones a los/as 80 despedidos/as, que dentro de muy poco, serán expulsados de la empresa.
La reunión del pasado viernes (7/06/13) fue un verdadero fiasco. El inspector al cargo de la mediación propuso un nuevo ere de reducción de jornada del 30% con cargo al SEPE de la jornada reducida. Por parte del Comité no nos negamos; nos comprometimos a estudiarla en caso de que la empresa se comprometiera a suspender el ERE presentado -en espera de que llegara la refinanciación prometida- y que presentara un nuevo expediente de despidos en el que estudíariamos entre todos "soluciones imaginativas". Sin embargo, no sirvió de nada, la empresa se negó en redondo; lo más que se comprometió fue a comprometerse a no despedir a nadie hasta el 21 de junio, dejándonos sin margen para presionar si no llegaba la refinanciación y sin tiempo para mejorar las condiciones de los 80 despedidos.
La empresa propuso bajar los despidos a 72 -no contaban las cuatro bajas voluntarias que han recibido- y mantener la reducción salarial lineal al resto de la plantilla en el 12% (una medida que ya había planteado en anteriores reuniones), una propuesta ridícula en una situación en la que no aseguran la indemnización mínima exigida por ley al conjunto de los despedidos.
Por tanto, no fue posible el acuerdo, una situación en la que, el propio Inspector coincidió en que la posición de la empresa no dejaba otra salida. Así que la huelga no sólo no se desconvocó, sino que sigue adelante. Mañana celebraremos asambleas con toda la plantilla y el martes 11 de junio a las 6 horas de la mañana empezará la primera huelga en los ochenta años de historia de Luxiona. No queda otro remedio y así lo entedenderán todos/as los compañeros/as de Canovelles. No sólo están en juego las indemnizaciones de los ochenta despedidos, sino el futuro inmediato de la plantilla. Todos sabemos que la deuda acumulada, la situación de pre concurso de acreedores nos aboca a una situación límite en el que está en juego la misma pervivencia de la empresa, por ello, debemos prepararnos y hacer valer nuestros intereses, porque está claro que si no nos defendemos pasarán por encima nuestro.
Desde aquí, hacemos una llamada solidaria a todos/as los/as lectores/as de este blog, para que el próximo martes día 11 de junio estén con nosotros/as. En la lucha sindical somos aprendices, y cualquier ayuda será poca. Hacemos un llamamiento a la solidaridad entre trabajadores/as. porque cada pequeña lucha en cada empresa es una victoria para el conjunto de la clase trabajadora; y cada derrota una derrota que nos arrastra más y más en el fango de la historia.
Os esperamos a todos/as los/as obreros/as de buena voluntad el martes a las 6 de la mañana en los piquetes informativos.

domingo, 2 de junio de 2013

Luxiona quiere despedir a la mitad de la plantilla

Apenas un año y dos meses después del último expediente de extinción, y después de un reguero de despidos individuales entre medias (casi 30 compañeros/as) Luxiona nos ha vuelto a presentar un nuevo expediente de regulación de empleo. En esta ocasión, es una agresión verdaderamente salvaje, dado que la propiedad y los ejecutivos pretenden despedir a casi la mitad de la plantilla (un 46%), lo que significará el desmatelamiento seguro de la producción en Canovelles.
El pasado 10 de mayo la empresa nos presentó la documentación, un expediente para 80 personas y la reducción del 15% para la plantilla restante, en un sacrificio salarial que significaría la eliminación del único plus de negociación colectiva de la empresa, con una fórmula típicamente empresarial de recortar a los que menos ganan. La empresa alega una situación económica dramática para justificar un recorte de la plantilla tan drástico, y en las cuatro reuniones que llevamos del periodo de consultas, no se ha movido un ápice en su propuesta inicial de despidos,  bajas voluntarias, indemnizaciones y otras medidas paliativas realmente ridículas.
La empresa se mantiene cerrada a qualquier avance negociador; ni siquiera el ofrecimiento de nuestro grupo de no hacer público el conflicto a cambio de concesiones, ha movido a la empresa a tener un gesto de generosidad con el conjunto de trabajadores; y le interesaba mucho -o quizás no tanto- porque la empresa solicitó preconcurso de acreedores el pasado 7 de mayo. Un secreto a voces, por tanto, dado que todo el sector de la iluminación, y toda la zona de Canovelles conocen desde hace semanas las maniobras de los ejecutivos de Luxiona.
Sea como fuere la situación, es tremendamente complicada por la cerrazón y el oscurantismo que está mostrando la representación empresarial. Se están negando reiteradamente a ofrecernos mucha documentación que les estamos pidiendo. Un balance de sumas y saldos, por ejemplo, para cotejar la situación alegada de palabra por los ejecutivos; después de mucha batalla nos entregaron uno, pero con los datos importantes agregados, es decir, una tomadura de pelo, que no nos permite comprovar la situación real de la empresa. Tampoco nos quieren entregar ni la lista de los/as trabajadores/as afectados/as, ni los creterios para efectuar los despidos. En la solictud del expediente, tan sólo alega que los despidos se realizarán según criterios de Polivalencia, absentismo y "motivación", pero se niegan en redondo a concretar estos criterios y a entregarnos el listado de trabajadores/as de la empresa bajo estos criterios. Una verdadera vergüenza que dejará a la empresa la libertad absoluta de despedir a quien le dé la gana, pues a nadie escapa, que la motivación, por ejemplo, no tiene medida objetivable. Nos tememos que el criterio sea la discriminación sindical, como pasó con nuestra compañera Eva, despedida en el anterior ERE y en la actualidad trabajando de nuevo con nosotros/as por la vulneración de su derecho fundamental a militar en nuestro sindicato.
Es una situación extraordinariamente complicada, porque a las maniobras de engaño y ocultación que están llevando a cabo la representación empresarial, se une el hecho de que la empresa ha anunciado que no dispone de liquidez para hacer frente a los posibles despidos, una situación que ha llevado incluso a una candidatura tan amarilla y tan cercana a la empresa como la de CCOO, a sumarse a la convocatoria de huelga a partir del 10 de junio.
Entramos en una semana crucial, donde a partir del miércoles, con un nuevo encuentro con la empresa, se precipitarán los acontecimientos. La empresa deberá presentar garantías de pago de las indemnizaciones, algo que la candidatura de CCOO está deseando para desmontar las movilizaciones. Para nosotros/as, evidentemente es un paso esencial, pero tanto si se consigue como si no -y en este último caso con más motivo- la movilización debería continuar hasta conseguir unos objetivos de negociación mínimamente dignos.
Luxiona ha pasada en apenas 6 años, de un crecimiento de dos dígitos y una situación patrimonial envidiable, a la situación lamentable que le ha llevado a solicitar el pre concurso y a no poder hacer frente a las indemnizaciones. Esta evolución no se debe sólo a la crisis, si no a la megalomanía de sus ejecutivos y propietarios, embarcados desde la pasada década en un proceso de expansión y de despilparro que le ha llevado a comprar empresas en Polonia y en Perú (esta última a finales del 2011 al tiempo que nos presentaban el primer expediente de extinción) en los años de más dureza de la crisis; una política de derroche que nos llevó, por ejemplo, a alquilar una oficina en Madrid en 2011, de 300 metros cuadrados, en la zona más cara del Estado, para poco más de seis trabajadores/as. Un gestión desastrosa, que se cuenta con el despido por decenas de trabajadores/as desde el 2008.
Con todo, desde el SOT-UGT no nos creemos los números presentados por la empresa. La empresa habla de un proceso de refinanciación y nosotros estamos convencidos que ya lo tienen cerrado. Ahora se trata de un órdago, una apuesta dura para inmovilizar a la plantilla y que el miedo anule la conflictividad. Es un proceso de deslocalización que la empresa ya lleva en marcha desde hace tiempo, sólo que la gestión desastrosa de los ejecutivos y su pasmosa falta de previsión, les ha obligado a acelerar el proceso y a implementarlo en peores condiciones.
Se trata un poco de eso, de recuperar la dignidad, de romper la tranquilidad y el buen humor -nada disimulados- que muestran los ejecutivos, de intentar reconducir un proceso de deslocalización industrial que la empresa está llevando a cabo sin apenas traumas, porque todos/as somos/as conscientes que lo que la empresa pretende es despedir al grueso de los/as trabajadores/as de fábrica (hasta un 58%) y proseguir la producción en las otras empresas del grupo (Polonia, China o Perú) desde la dirección de Canovelles. Es una situación terrible, digna de tomar las medidas de presión y protesta más drásticas. Veremos cuanto tardar en vendernos la mayoría de CCOO.

martes, 9 de abril de 2013

¿HAY QUE SER UN CABRÓN PARA LLEGAR A DIRECTOR GENERAL?

Traspasamos al blog algunos de los artículos que publicamos en nuestro último número de Tiempos Modernos, la revita de nuestra sección sindical. En concreto publicamos una reseña sobre este libro, de sugerente título, pero donde podemos ver las limitaciones de toda esta corriente empresarial de los recursos humanos, que por decirlo al modo marxiano, no tiene otra función que ponerle flores a las cadenas del trabajo asalariado.
Es una reseña corta, dado que publicando cada número del TM, hemos aprendido que tan importante es el contenido como la adecuación al espacio físico, pero se rescata lo esencial: que la autoridad es incuestionable y que los sindicatos -de los que tan importante es su omisión a lo largo del libro como sus escasas alusiones directas- somos un cáncer a los que no hay que darles ni agua.

En el SOT-UGT estamos siempre atentos a las publicaciones empresariales, en un afán de mejorar nuestra actividad sindical, conociendo un poco más a los dueños de nuestro trabajo. Así, ha llegado a nuestras manos este libro, publicado en 2011, que se dedica a responder en poco más de doscientas páginas, a la pregunta sorprendente que le sirve de título.
El libro que nos ocupa está escrito por Antonio Agustín y Sofía Delclaux, dos profesionales del ámbito de la consultoría  que diseccionan la temática sobre la base de  entrevistas amenas a cinco grandes directores generales . Al contrario de lo que pudiera parecer por su título, no estamos delante de un libro especialmente crítico, al contrario, sus autores no buscan la contradicción y llegan a empalagar con tanto elogio a los entrevistados. Aunque a lo largo del libro, los ejecutivos van desgranando reflexiones de interés (”me di cuenta de lo importante que es valorar el trabajo de los demás, aunque lo hagan de una forma fácil y sencilla, no significando que sea fácil ni sencilla” Miquel Lladó, DG Bimbo), la conclusión es bastante predecible: es mejor un director no cabrón que uno cabrón. Los DG entrevistados definen al director cabrón como una persona deshonesta que trabaja para sí, que trabaja en el corto plazo engañando a la empresa y a los colaboradores; un director que no dura mucho en cada empresa y que traslada el estilo de mando cabrón (muy contagioso) al conjunto de la empresa. El DG no cabrón, por el contrario, es un ejecutivo honesto que respeta y valora a los que trabajan con él y es capaz de generar un entorno positivo. Para los entrevistados ser un director cabrón es una elección personal y sobre todo, difícil, pues lo fácil es ser un embaucador que no propone ni gestiona y traslada todos los marrones a la escala de mando; lo más fácil es ser un cabrón en un país como el nuestro, donde más del 80% de los directores generales son directores generales cabrones.
Es difícil no coincidir con las propuestas del libro, pero  echamos a faltar una valoración crítica del mismo concepto de empresa. El accionista parece infalible y la viabilidad de la empresa se reduce al humor del director de turno, como si la empresa no fuera el escenario de una confrontación de intereses donde suelen ganar unos y perder otros. Se rehuye de forma expresa el tema de los sindicatos, y la única mención a ellos es para expresar sin pudor que hay que ocultarles todo, curiosa consideración, que nos devuelve a la metáfora del agente cancerigeno.
Que cada cual saque sus conclusiones y valore el estilo de mando que padece o prefiere, pero un director no cabrón tampoco cuestiona la injusticia de la empresa como un buen dictador no legitima una dictadura, sólo lo convierte en un déspota ilustrado.
San Agustín, A.,-Delcloux, S., ¿Hay que ser un cabrón para llegar a Director General? Ed. Almuzara, Córdoba, 2011.

lunes, 1 de abril de 2013

UGT: ¿SE PUEDE PROFUNDIZAR LA DEMOCRACIA INTERNA?

Antonio Juste, secretario
general de la Unión comarcal
de Vigo, suspendido de
militancia.
Al principio del mes pasado escuchamos varias noticias sobre nuestro sindicato, que cuando menos, nos dejaron muy mal sabor de boca. Ambas las escuchamos la misma mañana, lo que propició un cierto desasosiego seguido de una necesaria reflexión sobre el nivel de democracia interna que atesoran los sindicatos confederales.
La primera noticia informaba sobre la suspensión cautelar de militancia de Antonio Juste, secretario general de la Unión Comarcal de Vigo, por unas críticas a la dirección de Galicia;  la segunda noticia recogía las declaraciones de Pepe Álvarez, nuestro secretario general, deshojando la margarita sobre su posible reelección en el congreso de abril.
Referente al caso gallego, el dirigente vigués había sido sancionado con la suspensión de militancia por el envío de una carta a la ejecutiva del sindicato en Galiza, donde criticaba los altos salarios de los dirigentes, así como la alta partida presupuestada para los gastos de representación de la comisión ejecutiva, mientras se rebajaban los sueldos a los trabajadores de estructura, o en su Unión comarcal no tenían ni para pagar el teléfono o la limpieza de los locales. Por lo visto, la decisión de la dirección sindical gallega -pendiente de la revisión del Comité de garantías confederal- venía marcada por la filtración de la carta a la prensa, obviamente atribuida al propio Juste.
Se hace difícil tomar partida por nadie en una situación como la descrita, donde seguro que desconocemos los matices y las razones de una medida disciplinaria tan dura; a nadie escapa el ERE de extinción que acaba de pasar la UGT de Galiza, así como la reorganización administrativa, eliminando Uniones para reducir costes, pero tampoco que el dirigente sancionado no va a poder tomar parte en los procesos congresuales que se están llevando a cabo este año. Desconocemos también, si la direcció de UGT en Galiza, tiene pruebas fehacientes de que haya sido el propio Juste el que haya filtrado la carta, pero aún en ese caso, lo que se puede considerar un acto de deslealtad en el plano moral, no significa un acto punible desde un punto de vista corporativo, y mucho menos desde el punto de vista de la democracia interna. Es precisamente esto, lo que, desde la distancia, parece quedar en entredicho: la humildad de los dirigentes para encajar las críticas y la falta de foros para articular el debate de los dirigidos.
La segunda noticia, sin duda, nos queda mucho más cerca, nos referimos a nuestro secretario general, Pepe Álvarez. En declaraciones a L´Hora L de la SER venía a decir que llevaba mucho tiempo en la secretaria general, que era hora de que le buscaran un relevo, cosas por el estilo, para acabar diciendo que en una situación excepcional como la que vivíamos, si se lo pedía el sindicato, él se sacrificaba y se volvía a presentar a la reelección. Yo descifré el sentido de sus declaraciones al momento, no así los periodistas que le entrevistaban, que daban por descontada la renuncia de Álvarez a la reelección, tuvo que ser el propio entrevistado el que, con un nuevo circunloquio un poco más directo, sacara a los entrevistadores de su error.
Obviamente, las declaraciones del secretario general fueron bastante decepcionantes. Empezar a hablar de que ya se lleva demasiado tiempo al mando del sindicato, de poner en negro sobre blanco la necesidad de relevos, de gente nueva, de gente joven, para luego presentarse así mismo como el hombre providencial que el sindicato necesita en una situación de emergencia, es cuando menos, eso, decepcionante. Pepe Álvarez lleva ya 23 años al frente de la UGT de Catalunya y llegará a los 27 cuando vuelva a ganar el congreso de abril. Son demasiados, incluso para él.
Siempre hemos defendido que lo importante son las ideas y las propuestas, no las personas que las sostienan o las llevan a cabo, pero una organización con los mismos líderes durante tres décadas no es una organización sana. Que estén las mismas personas, en este caso, es la garantía de que no va a haber grandes cambios y eso es precisamente lo que más necesitamos en estos momentos, nuevos líderes y nuevas ideas, para afrontar una situación sobre la que, si no se actúa, va a ser de verdadera emergencia.

En las diferentes asambleas en las que hemos participado, la limitación de mandatos ha sido un tema recurrente, pero nos tememos que ninguna enmienda en este sentido ha conseguido saltar a la ponencia entratégica del XIV congreso. Es una lástima, porque ésta parece la primera medida más adecuada para regenerar la democracia interna de una organización demasiado complaciente con su propia historia. Ahora que vemos la emergencia de otros movimientos sociales que nos superan por todos los lados, no podemos evitar mirar con envidia el éxito social y electoral de la CUP, con esas limitaciones de mandatos representativos de cuatro años, con esas rotaciones obligadas y nosotros con estos líderes sindicales vitalicios y viejunos: Álvarez, Lito, Cándido...